Cada año son más las parejas que deciden celebrar su boda en una cuidad diferente de la suya, y lo hacen por varias razones: por trabajo, por motivos familiares o por la simple aventura de realizar algo diferente. La idea del " Destination Wedding", boda de destino es algo motivador para un fotógrafo de boda. Es una ocasión para conocer sitios diferentes y realizar imágenes originales en lugares preciosos. Este año he tenido la suerte de visitar Roma en más de una ocasion. Hace pocos meses realicé el reportaje de Ana y Javi y ahora he vuelto a esta acogedora cuidad con otra pareja: Tania y Félix.

En concreto Roma es una cuidad que conozco bien desde pequeño, aquí vive parte de mi familia y un puñado de buenos amigos, esto me hace sentir cómodo cada vez que vuelvo. El encanto de Roma está presente en cada monumento y en cada ángulo, es maravilloso perderse entre sus calles, los residentes romanos nos reciben con su simpatía y amabilidad. Es una de las ciudades más románticas del mundo, Fellini la inmortalizó en su pelicula La Dolce Vita, describiendo sus mayores atractivos.

Lo que más agradezco a las parejas es el tiempo y la confianza que me dan. El tiempo es un elemento muy importante para un fotógrafo ya que para hacer las cosas bien hay que hacerlas sin prisa. Cuando tengo tiempo puedo experimentar y hacer mejores fotos. La confianza es fundamental para que las fotos sean naturales y espontáneas. Tania y Felix me han ofrecido ambas cosas y les agradezco enormemente por esto como persona y como fotógrafo.

Tania y Felix han decidido celebrar su boda Roma, una aventura especial que nunca olvidarán. He conocido esta pareja durante el reportaje pre boda que realizamos unas semanas antes de la boda. Su viaje empezó por Valencia, en coche. Durante el recorrido pararon en varias ciudades: en Barcelona en Florencia... y sin prisas, pero con ganas, llegaron a Roma para celebrar una ceremonia íntima y sencilla.

En el día de su boda tuve la oportunidad de acompañarlos y ser testigo de su aventura. La ceremonia civil se celebró en el Consulado Español en Roma. Tania y Felix se sentaron frente al cónsul, un personaje muy amable y cercano que ofició un la boda acompañado por palabras sinceras y emotivas. Cuando existe el verdadero amor sobran las palabras. Asistir a estos momentos tan significativos e íntimos es uno de los privilegios de mi trabajo.

Después de la ceremonia recorrimos varios lugares de Roma, paseando y disfrutando el día. Visitamos el Phanteon, una iglesia con casi dos mil años de historia con una luz absolutamente maravillosa y mágica. Estuvimos en Villa Borghese, uno de los parques más bellos de Roma para realizar unos retratos de esta pareja en un entorno natural y sugestivo. He contado con la colaboración de Ernesto, un fotógrafo que me ha asistido y nos ha ayudado durante la tarde y sobre todo a sostener el flash. Gracias Ernesto!

Estas fotos son el fruto de este tiempo que pasamos juntos y de la confianza que Tania y Felix me dieron.

Espero que os gusten.

Me encantan los comentarios!

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